El niño nos despierta para la vida
El domingo pasado fue el día del nacimiento de Maria Montessori: 31 de agosto. Admiro mucho a esa mujer y creo que su historia es algo que muchos, o quizás todos, deberían conocer. No porque ella creyó un método pedagógico pero porque su historia es de superación tras superación. Pero no es sobre eso que quiero hablar hoy. Es que Maria Montessori tiene una frase que me gusta mucho: "El niño nos despierta para la vida." Si pensamos en un niño pequeño, que entra en la habitación de sus padres mientras aún están dormidos, porque es sábado y es el día que él sabe que no toca trabajar, ni ir al cole, que estaremos en casa en familia... y este niño entra en la habitación a oscuras, se acerca a sus padres y les despierta; quizás riéndose de felicidad o besando a sus padres tan amados. Los padres, adormilados, cansados de la semana de tanto trabajo, se quejarán y dirán al niño que quieren dormir, pero el niño les recordará: "pero papá, pero mamá, ya es sábado, es día de ir al parque". Así el niño nos despierta para la vida, porque nos quiere, y no quiere perder un segundo sin nosotros. A medida que el niño crece, eso sigue ocurriendo. No es algo solo de los niños pequeños. Un niño mayor quizás no entre en la habitación en un sábado a las 7 de la mañana para despertar a sus padres para ir al parque, pero nos despertará con sus preguntas ingeniosas y con su humor fino, que muchas veces ve cosas que nosotros no vemos más. Incluso un adolescente puede despertarnos para la vida, como nos decía Montessori. Otro día, mi hijo de 14 años, de la nada totalmente, me dice: "Mami, imagina que fueras uno de los X-Men, que poder te gustaría tener?" En esos momentos estaba liada pensando en mis problemas (que ahora no son pocos), y quizás podría haber respondido: "¿Pero que tontería es esta?", pero no, me recordé de Montessori... y di una sonrisa. Paré lo que estaba haciendo y le dije: "Creo que me gustaría mucho ser invisible!" Si estamos atentos al niño, veremos que él siempre quiere ayudarnos a volver a la vida. Siempre está preparado para recordarnos que hay algo mucho más importante por lo cual vivir. Si ahora mismo tu vida está un caos, y te sientes con miedo, preocupada, y parece que la esperanza se ha ido para siempre... recuerda: pon tu atención en tu niño. Observa. No importa que edad tenga. Porque el niño siempre nos despierta para la vida. El niño es la esperanza encarnada. Es la fuerza que tenemos de ver. Porque es la que más tiene por enseñarnos. Espero que tengas una feliz semana. Alessandra PD: Mi último vídeo en Youtube por homenaje a Maria Montessori está siendo un éxito. ¿Ya lo viste? |